Luego del volumen de negocios impulsados por el “dólar soja” la oferta de la oleaginosa se retrajo a la necesidad puntual de algunos productores. La disponibilidad de mercadería es menor que el año pasado a la misma fecha y la incertidumbre productiva de la próxima campaña es mayor al 2021. La demora de las siembras 22/23 por el clima despega al mercado local del externo que sigue la demanda de China y el clima en Sudamérica.
Fuente: https://www.agrositio.com.ar/