En la séptima jornada de negocios de la segunda edición del dólar soja, el régimen cambiario especial que reconoce 230 pesos por dólar, las fábricas propusieron ayer 90.000 pesos por tonelada de la oleaginosa para las entregas sobre las terminales del Gran Rosario, un precio que resultó 2000 pesos superior al ofrecido anteayer y que se constituyó en el valor nominal más alto histórico por el grano grueso en la plaza local.
Pese a dicha mejora, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) destacó ayer en su comentario diario que durante la jornada “se observó una merma en la actividad, con un recorte en el número de participantes”.
Una fuente del sector comercial coincidió con la entidad y contó a LA NACION que los 90.000 pesos “no provocaron el aluvión de ventas esperado” y que durante la rueda “se operaron unas 250.000 toneladas, entre fijaciones y negocios por mercadería a remitir”.
Ese volumen estimado se agregaría a las 2.106.327 toneladas que según la BCR se comercializaron entre el 28 de noviembre y el lunes, con nuevos contratos por un total de 1.346.746 toneladas, fijaciones por 718.728 toneladas y rectificaciones por 40.854 toneladas.
A contramano de lo que sucedió la semana pasada, cuando los valores ofrecidos por los compradores de las fábricas eran inferiores a la capacidad de pago, ayer los 90.000 pesos superaron el FAS teórico calculado por la BCR en 86.768 pesos por tonelada para la industria aceitera exportadora.
Para los puertos de Bahía Blanca y de Necochea los exportadores de grano sin procesar no hicieron ofertas abiertas por soja con entrega inmediata.
Como reflejo de la tónica alcista vigente en la Bolsa de Chicago, las posiciones diciembre y enero de la soja en el Matba Rofex sumaron US$4,50 y 8,50, al cerrar con ajustes de 383 y de 424,50 dólares por tonelada. Para el contrato mayo la mejora fue de US$8 y el valor de cierre, de 387 dólares.
Lo dicho, las pizarras del mercado estadounidense reflejaron ayer alzas de US$6,34 y de 6,06 sobre las posiciones enero y marzo de la soja, cuyos ajustes fueron de 534,62 y de 537,01 dólares por tonelada. Esas subas estuvieron directamente relacionadas con la situación que atraviesa la Argentina, donde la siembra de la oleaginosa está muy demorada y donde el clima se mantendría seco y muy caluroso durante buena parte de la semana sobre las principales zonas productoras de soja del país.
El trigo prolongó su caída en Chicago
Fuera de la coyuntura doméstica, en el mercado estadounidense se destaca la prolongada caída de las cotizaciones del trigo, por una fuerte liquidación de contratos por parte de los grandes fondos de inversión. Luego de que el viernes pasado el cereal completó la cuarta semana negativa seguida, las pérdidas se repitieron en las dos primeras ruedas del actual segmento comercial.
Ayer la posición marzo del trigo en Chicago y en Kansas cayó US$3,68 y 4,32, en tanto que su ajuste resultó de 267,86 y de 304,97 dólares por tonelada. Desde el 31 de octubre este contrato retrocedió un 18,9 y un 14,8% frente a los 330,42 y a los 357,98 dólares vigentes entonces, respectivamente.
Los especialistas destacan entre las razones que volcaron al mercado de trigo estadounidense a la baja la pobre performance exportadora por la fuerte competencia de la oferta de la Unión Europea. Además, a eso se agrega el mayor ritmo ganado por las ventas de Rusia tras un lento inicio en el primer trimestre del ciclo comercial 2022/2023 (julio, agosto y septiembre) y la renovación por otros 120 días del acuerdo que posibilitó el corredor seguro sobre el Mar Negro para los embarques de Ucrania.
En el mercado local los exportadores ajustaron ayer sus ofertas por el trigo con entrega en enero sobre el Gran Rosario de 333 a 330 dólares por tonelada, mientras que para Bahía Blanca y para Necochea volvieron a proponer 325 y 335 dólares por tonelada, respectivamente.
Las pizarras del Matba Rofex mostraron bajas de US$2 y de 1,50 sobre los contratos diciembre y enero del trigo, cuyos ajustes fueron de 330 y de 330,50 dólares por tonelada.
Fuente: La Nación, Dante Rofi.