Home > Exposiciones > La Expoproductiva del INTA terminó con gran concurrencia de vecinos y productores del Alto Valle

La Expoproductiva del INTA terminó con gran concurrencia de vecinos y productores del Alto Valle

Muestras de maquinarias, nuevas tecnologías y exposiciones en la estación experimental, fueron algunos de los atractivos que convocaron a más de 3000 personas. Fueron tres jornadas que convocaron a muchas familias del Alto Valle.

Espacios de intercambio tecnológico, capacitaciones, muestras dinámicas y parcelas demostrativas para el agro, fueron algunas de las actividades de albergó la exposición más representativa de la producción de la región. El encuentro se desarrolló esta semana en la sede del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en Guerrico. Participaron vecinos, productores, estudiantes de escuelas agropecuarias, profesionales, las intendentas de Roca y Allen, ministros del gobierno provincial y autoridades del INTA.

Con el foco puesto en la innovación para una agricultura moderna y de intercambio tecnológico, la propuesta de esta Expoproductiva 2022 logró consolidarse como un espacio de capacitaciones y oportunidades, para que las empresas de bienes -y las prestadoras de servicios- pudieran poner sus productos a consideración de agricultores.

«La convocatoria a la muestra fue muy buena. Nos sorprendió que viniera mucha familia. A pesar de que la exposición está orientada hacia la técnica, profesionales y productores, hoy vinieron muchos vecinos preparados para pasar la tarde en nuestro predio. Ademas, 7 grupos escolares también recorrieron los stands», expresó Lorena Curtino, Comunicadora del INTA Alto Valle.

Para los organizadores de la expo, los temas y puestos más destacados estuvieron relacionados con la preparación de las parcelas donde se plantará cannabis medicinal y los stands de agroecología. También, el desarrollo de horticultura sustentable y las visitas guiadas fueron actividades relevantes para la jornada.

Además, hubo demostraciones dinámicas de maquinaria y tecnología innovadora, en la que se pudieron observar equipos en movimiento, plataformas, pulverizadoras, hiladoras y picadoras de podas, riego con paneles solares y riego antiheladas, entre otras.

Empresas del sector también tuvieron actividades en una sala de conferencias, en la que brindaron charlas comerciales y técnicas, promoviendo el intercambio de saberes y respondiendo consultas de los interesados.

«Otro gran caballito de batalla fueron las muestras dinámicas, que funcionan muy bien. Algunas empresas vendieron maquinaria. Productores preguntaron por los riesgos de heladas, consultaron por la malla antigranizo y los sistemas de riego bajo aspersión«, detalló Curtino, quien reconoció que el interés en el recinto meteorológico aumentó, respecto a las heladas que azotaron la región a comienzos de semana.

Fuente: https://www.rionegro.com.ar/

La comunicadora del INTA afirmó que, la participación de diferentes foodtrucks fueron importantes para que los más de 3.000 asistentes pudieran vivir tres extensas jornadas disfrutando de las mejores bebidas y comidas al paso.

Las disertaciones abarcaron temáticas como la nueva agricultura digital, herramientas tecnológicas disponibles para una horticultura moderna, automatismo y control a distancia para sistemas de riego, sistemas de protección en frutales y tecnologías que funcionan con energías renovables, entre otros.

En cuanto a la muestra, la exposición que comenzó desde el jueves -y concluyó esta tarde- contó con espacios estáticos, proponiendo un recorrido por 40 stands institucionales y empresariales. Municipios, escuelas, asociaciones gremiales, organismos públicos, destacadas empresas nacionales y regionales, estuvieron presentes para disfrutar de este punto de encuentro.

Te puede interesar
Una tecnología estratégica aporta ventajas para los cultivos de soja de segunda
La ganadería argentina termina un 2022 con algunas señales positivas y múltiples desafíos
El campo pide modificar la Ley Impositiva de Axel Kicillof
Sin un aluvión de ventas, la soja se negoció en Rosario a 90.000 pesos por tonelada